Mujeres con formación STEM, al frente de ideas de negocio en el programa Emprendimiento tecnológico CEIN DIGITECH (y II)

Con motivo de la conmemoración del el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, entrevistamos a participantes en el programa de Emprendimiento tecnológico-digital CEIN DIGITECH, que ha desarrollado CEIN de forma semipresencial en la Universidad Publica de Navarra (UPNA).

Lorena Castaño y Lina Ramirez, con formación en una disciplina STEM (acrónimo que responde a las siglas inglesas de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), son dos de ellas. Cada una ha explorado en el programa las opciones de creación de una empresa tecnológica.

Lina Ramírez es ingeniera física por la Universidad del Cauca en Colombia y actualmente estudiante del Master en Ingeniería Biomédica de la UPNA. Llegó a Málaga al laboratorio de impresión 3D FABLAB Málaga, donde desarrolló un prototipo de modelo anatómico impreso en 3D para la exploración del oído humano. Ha desarrollado una aplicación móvil para la enseñanza interactiva de anatomía humana con realidad virtual, realidad aumentada e impresión 3D, proyecto con el que ha tomado parte en en el programa de Emprendimiento tecnológico-digital CEIN DIGITECH.

Lorena Castaño es ingeniera electrónica en Instrumentación y control y Máster en Ingeniería Biomédica por la UPNA. Ha trabajado en numerosos proyectos en sectores como el petroquímico, la construcción y el agroalimentario en Venezuela. Ha trabajado dentro del grupo de investigación de Sensores de Fibra Óptica de la UPNA. Actualmente trabaja en la spin-off universitaria PyroisTech que diseña, desarrolla y fabrica herramientas optoelectrónicas. Ha participado en el programa de Emprendimiento tecnológico-digital CEIN DIGITECH con la idea-prototipo de desarrollo de dispositivos electrónicos de uso personal que protejan de gases nocivos para la salud.

¿Qué te motivó a estudiar ingeniería?

Lina Ramírez (L.R.): Siempre estuve interesada en la unión de la medicina y la ingeniería. Elegí ingeniería física y he podido enfocarme en la rama de la ingeniería biomédica y hacer lo que me apasiona.

Lorena Castaño (L.C.): Quería ser ingeniera de vuelo y me recomendaron estudiar ingeniería electrónica. En cuanto empecé mis estudios, mi atracción por la electrónica fue en aumento. Además, mi padre tenía una pyme especializada en pesaje electrónico y quería realizar proyectos que dieran solución a las diferentes necesidades de la industria.

¿Qué diferencias de género has encontrado?

L.R.: Tanto en los estudios de ingeniería como en el master, la mayoría de estudiantes han sido hombres.

L.C.: Nunca he percibido la diferencia de género en ninguna de las etapas de estudio. Siempre he percibido las mismas oportunidades para la elección de los estudios, las prácticas y el acceso al empleo.

¿Tienes referentes de mujeres con tu misma formación o background? ¿Quiénes son?

 L.R.: July Alejandra Gonzalez Valladares, MSc, ingeniera física de la Universidad del Cauca, actualmente investigadora en física médica en Viena.

L.C.: Conozco muchas mujeres que estudiaron conmigo de diferentes ingenierías (mecánica, naval, civil, electrónica, aeronáutica, etc.). De hecho, la decana de mi facultad era mujer y había varias profesoras.

En tu opinión, ¿por qué las mujeres no eligen carreras STEM?

L.R.: Creo que la sociedad ha mostrado a la mujer en profesiones que siguen unos estereotipos determinados y se ha transmitido que las carreras de ciencias e ingenierías son difíciles.

L.C.: Creo que piensan que es un trabajo mucho más exigente y que no se tienen muchas relaciones interpersonales. Muchas mujeres prefieren trabajos donde se puedan relacionar más con las personas que con las maquinas.

En general, a las personas del entorno científico o del entorno universitario les cuesta salir del laboratorio o trasladar desarrollos al mercado. ¿Qué dificultades crees que existen o tienen las personas tecnólogas vinculadas al entorno universitario?

L.R.: Nos cuesta llevar los desarrollos al mercado, precisamente porque nos encontramos en nuestra “zona de confort”. En el momento en que decidimos emprender, hay un mundo nuevo para explorar, para el cual no hemos sido formados y gracias a proyectos como DIGITECH, nos permite adquirir conocimientos para emprender en nuestros futuros proyectos.

L.C.: Pienso que son personas con una gran capacidad intelectual, que se caracterizan porque siempre están entre los mejores y son muy perfeccionistas. Su trabajo depende de su capacidad, son personas que muy pocas veces se equivocan en su trayectoria profesional y salir del laboratorio al mercado es depender de muchas variables. Miedo al error y a equivocarse.

¿Qué apoyos o servicios pueden llevar a que el alumnado o los investigadores se planteen la creación de una empresa?

L.R.: Programas de emprendimiento y charlas motivacionales.

L.C.: Los programas del CEIN me parecen muy acertados, ya que dan una orientación global y específica de todo lo que conlleva crear una empresa, tanto en la parte operacional como en la administrativa. Además, las diferentes convocatorias tanto del Gobierno de Navarra, Nacionales y de la UE.